'Infantil es la experiencia más gratificante que una profesora puede vivir a diario'


Cristina Álvarez-Ossorio Micheo
Estudió Magisterio de Educación Primaria y su especialidad es Infantil. Posteriormente cursó estudios de Pedagogía y comenzó a trabajar en un colegio privado, cubriendo una sustitución como profesora de Infantil. Cuando terminó, acudió a una entrevista en nuestro Colegio, que -según nos cuenta- le brindó una gran oportunidad.
El próximo curso hará 25 años que forma parte de nuestro Claustro de Profesores. Ha pertenecido al equipo de Infantil durante la mayor parte de su trayectoria profesional, como tutora y profesora y además ha colaborado con Primaria en algunas ocasiones.
En el momento de publicarse esta entrevista (febrero 2020) imparte clases a los niños de 3 años, "un mundo maravilloso en el que uno no debe perder la sonrisa", afirma. "Infantil es un universo fascinante en el que todas las piezas clave (padres, tutores, profesores, monitoras) interactúan, acompañándolos en sus primeras andaduras en el Colegio y en la vida."

¿Qué es lo que más te gusta de tu profesión?
Llegar a clase por las mañanas y encontrarte con esas caritas, saludándote con alegría, queriéndote contar todos a la vez algo importante para ellos. Te traslada de una forma u otra a su mundo diminuto. Para mí este momento es algo entrañable, escucharlos, abrazarlos, acompañarlos, atender al que llora, en definitiva, que empiecen el día con alegría.

¿Cuándo surge tu vocación de profesora?
La verdadera vocación de maestra la tuve desde niña, imitaba a mis profesores al llegar a casa en mis ratos de juego, sus gestos, sus bromas, ponerme delante de una pizarra y desglosar una tarea, leer una lección, aclarar una duda, llamar la atención por una conducta inadecuada por algo que me hubiese ocurrido a mí misma, un sinfín de peculiaridades de todos y cada uno de ellos. Me gustan los bebés, los niños y todo lo que ello engloba: su crecimiento, su desarrollo, sus habilidades y su relación con el mundo que les rodea. Por ello y gracias al empuje de mi padre, me decidí a estudiar magisterio.


¿Qué recuerdas de tu primer día de clase?
Cuando llegué al Colegio mi primer contacto fueron los alumnos de 5 años de los que aún recuerdo algunos nombres. Entré a sustituir a una profesora que había dejado de trabajar en el Colegio. Lo que más me llamó la atención fue la diversidad del alumnado al que me enfrentaba y a los que quería de alguna manera atraer para conocer bien a cada uno de ellos. Pasé varios días observándolos en los distintos espacios de nuestro Colegio, en los que cada uno ya tenía su sitio preferido. Me miraban, me cogían la mano, me preguntaban… Los primeros días no se olvidan.

¿En qué crees que ha mejorado el Colegio?
Nuestro Colegio ha crecido mucho desde entonces. Los nuevos espacios que se han creado para nuestros alumnos son maravillosos. El edificio de Infantil cuenta con unas instalaciones al aire libre con mucho aprovechamiento. El Colegio ha crecido en cuanto a tecnologías, desarrollo en las ciencias, inmersión en idiomas, intercambios, música, artes y deporte. En definitiva, un salto cualitativo en experiencia y aprendizaje que preparan al alumno para el mundo globalizado al que se enfrenta.


Si no pudieras ser profesora, ¿a qué te dedicarías?
Desde el principio lo tenía claro, aunque como dije anteriormente, todo lo que atiende al mundo del niño me llama la atención: la psicología, la pediatría e incluso el teatro.

¿Qué peculiaridad o rasgo propio destacarías de la enseñanza en el Colegio?
Nuestra seña de identidad es nuestro Ideario. El profesorado de nuestro Colegio atiende a los alumnos entendiendo sus características evolutivas y personales y actúa como guía durante toda su etapa escolar. Somos parte importante en este proceso y nuestro esfuerzo, respeto y dedicación debe impregnar el aula.

¿Podrías contarnos algún momento especial de tu trayectoria docente?
Son muchos, pero desde que se despiden en Infantil y los ves graduarse en Bachillerato, no deja de ser emocionante para nosotros. Parece mentira, pero ellos siguen acordándose de ti.


¿Y alguna anécdota?
En Infantil todos los días tengo que reír a carcajadas con mis alumnos o esconderme para reír por sus ocurrencias. El ratito de las asambleas matinales en las que cada uno cuenta lo que le apetece o se le ocurre en ese momento, o simplemente repite lo que otro compañero ha dicho, queda grabado en mi corazón por el entusiasmo que le ponen para recibir en actitud de escucha y empatía. Es de los momentos del día que más contenido significativo tiene para mis recuerdos.

¿Cuál es el sueño de un profesor de tu asignatura?
Por supuesto hacerlos felices cada día y a lo largo de toda su etapa en Infantil. Para mí, que vengan contentos al Colegio es buen síntoma de su experiencia escolar y eso me lo propongo a diario. Hay una frase de María Montessori que me encanta y quiero compartir: “Siembra en los niños ideas buenas. Aunque no las entiendan, los años se encargarán de descifrarlas en su entendimiento y de hacerlas crecer en su corazón.”
Infantil es un sueño, es magia, es música y es la experiencia más maravillosa y gratificante que una profesora vive a diario en su aula.

¡¡Gracias por compartir tus experiencias con los lectores de la web!!
Gracias a ti, Pedro. Ya sabes que me apasiona este mundo y aquí estoy para lo que necesites.


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© Fotografías: P. Jaén
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