Entrevistamos a Julia Martínez Fernández, antigua alumna de la última promoción graduada en nuestro Colegio (2023). Está estudiando un doble grado en Ingeniería Informática y Matemáticas en la Universidad de Sevilla, y ha formado parte de la XVIII edición del programa de becas Europa Santander de la Universidad Francisco de Vitoria.
¿Durante cuántos años fuiste alumna del Colegio?
Entré en el colegio con 3 años en infantil, y fui alumna hasta junio de 2023, cuando me gradué de Bachillerato.
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| 2º Premio del VI Certamen José María Pemán |
¿Cómo definirías tu paso por el Colegio?
Es difícil describirlo, porque he pasado tantos años aquí, que para mí sería definir mi vida. He pasado más horas aquí que en casa. Para mí este colegio es un hogar, y como cualquier otro, tengo todo tipo de recuerdos asociados con él. Lleno de altibajos, de lecciones que ya no olvidaré jamás.
Pero por dar una respuesta más concreta, diré que mi paso por el Colegio ha sido un camino. Un camino que cuando uno comienza a andar no tiene muy claro a dónde lo dirige, y camina por él casi por inercia. Pero ya en el último tramo, parece darse cuenta de que siempre estuvo dirigido hacia una meta que sólo nuestros maestros conocían. Es un camino personal, sí, pero jamás sería posible sin la guía del profesorado, la dirección y todo el personal de este Colegio, que cada uno a su manera, trasforman estas paredes y estos patios en un lugar para el aprendizaje y el conocimiento, al que a menudo sus alumnos terminan llamando casa.
Tras un proceso de selección entre más de 4000 candidatos de toda España, conseguiste una de las Becas Europa Santander de la Universidad Francisco de Vitoria y el Banco Santander. ¿Qué tal la experiencia? ¿Qué ha cambiado en ti?
Para mí ha sido una de las mejores experiencias de mi vida. El broche de oro a una etapa escolar muy emocionante, y el inicio de otra aún mayor.
Empezamos el viaje en Alcalá de Henares, y después estuvimos en Salamanca, Cambridge, Londres, Heidelberg, Santiago de Compostela y Madrid, donde tuvimos una audiencia con S.M el Rey Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela.
El proceso de selección duró más de un año, y requirió mucho esfuerzo, pero sigue siendo muy gratificante. Becas Europa es un viaje literal y figuradamente. He aprendido mucho sobre lo que quiero que sea mi vida, y concretamente, mi camino por la universidad. Esas lecciones me han ayudado a empezar mi camino universitario de otra forma, a apreciar los regalos que se me presentan, y a echar la vista atrás de vez en cuando para hallar en la Historia explicaciones de nuestro presente.
Y además de eso, ahora tengo 49 compañeros de viaje. Muchos de ellos también están en la Escuela de Liderazgo Universitario en la Universidad Francisco de Vitoria, y podré compartir otros cuatro años con ellos.
¿Qué representa para ti el Colegio en tu vida actual? ¿Qué valores sientes que te inculcaron principalmente en el Colegio?
Es una pregunta que me he hecho mucho estos últimos meses. Con el inicio de mi vida universitaria y todas las experiencias que he tenido en concursos literarios, o en Becas Europa especialmente, he descubierto que tengo una formación en valores muy sólida de la que no era muy consciente. Y ese tipo de enseñanzas no pueden provenir de otro lugar que no sea este.
Sin duda el departamento de ética tiene algo que ver con eso. En mi paso de secundaria comencé a dar clases de valores éticos, y descubrí, desde la tolerancia, que no debo aceptar como válido todo lo que se me presente. Para mí han sido como una guía, una serie de instrucciones por si alguna vez necesito redirigir mi vida, o asegurarme de que la llevo por el buen camino.
Pero además, lo más especial de la filosofía de este Colegio es que te invita siempre a dar un paso más allá. Que te acompaña en el proceso, que te muestra lo bonito y emocionante que es aprender. ¿Qué puedes enseñar a un alumno mejor que eso?
¿Qué fue lo que más te marcó del Colegio? ¿Algo del Colegio que ya estés echando de menos?
Muchísimas cosas. Bachillerato son dos años muy especiales, y es lo que más echo de menos. La complicidad con mis compañeros, el apoyo de mis profesores y sobre todo esas las clases que transmitían tanta pasión por el conocimiento (no eran todas así, claro jajaja). He tenido muchísima suerte de ser alumna del profesorado de este colegio. Cada uno, desde sus especialidades tan distintas, se aseguran de que comprendemos lo mucho que tenemos que aprender de sus asignaturas.
Y por supuesto, ya estoy echando de menos a mis compañeros de promoción. No puedo esperar a reencontrarme con ellos y recordar todo lo que compartimos en este Colegio.
¿Participaste en algún programa de intercambio internacional del Colegio? ¿Qué te aportó?
Estuve en Sandringham en St. Albans (Londres) en 2º de ESO. Me hubiera gustado haber podido ir a Estados Unidos en 4º de ESO, pero la pandemia lo hizo imposible. Aun así, mi experiencia en Inglaterra me marcó mucho. Tuve la oportunidad de descubrir lo emocionante que resulta compartir experiencias con alumnos de otros países, además de mejorar mi inglés. Sin duda es una de las mejores oportunidades que ofrece el Colegio.
¿Qué consejo darías a los actuales alumnos del Colegio?
Les diría que aprovechen cada oportunidad que se les ofrezca. No sé si hubiera descubierto mi afición por la música o por la literatura si no hubiera sido alumna aquí. Y de lo que más orgullosa me siento es de haber sacado lo mejor de mí en cualquier cosa que me proponían mis profesores, llegando incluso a enfrentarme a situaciones en las que no me sentía nada cómoda. Pero son ese tipo de experiencias las que te hacen crecer y perseguir esa excelencia que nuestros profesores nos "exigen", en el mejor sentido de la palabra.
La etapa escolar es un regalo, un amplio terreno de experimentación con muchas posibilidades. La mejor forma de sacarle partido es no quedarse en la superficie.
¿Por qué le recomendarías tu Colegio a alguien? ¿Cuál crees que es su punto fuerte?
Por supuesto hay ciertas cosas que, objetivamente, se hacen de maravilla en el Colegio. Una es sin duda la enseñanza de idiomas, que es excelente; otra, su programa de intercambios.
Sin embargo, hablando desde lo personal, tendría que destacar a todo el departamento de Lengua y Literatura, y el de Música. Gracias a sus profesores ahora sé que tanto la literatura como la música siempre van a formar parte de mi vida. Formé parte de la excelencia de literatura durante varios años, y me presenté a muchos concursos literarios que me invitaron a seguir perfeccionando mi escritura.
Respecto a la música, estuve en el programa de conservatorio del Colegio y en clases de piano. Además, formé parte del maravilloso coro del Colegio. Ahora estudio saxofón alto en la Escuela de Música de la Banda de Música Nuestra Señora del Sol, así que no parece que vaya a dejar la música pronto.
Han sido dos grandes pasiones que descubrí cuando era alumna aquí, y siempre estaré agradecida por ello.
Muchas gracias, Julia, por compartir con nosotros tus experiencias.
Gracias a ti, Pedro, por darme la oportunidad de agradecer a este Colegio todo lo que ha hecho por mí, y por hacerme sentir siempre como en casa. ¡Gracias!
